Nuestra Señora se apareció en estas iglesias de Divinópolis, Brasil, durante el Rosario y Adoración del Santísimo Sacramento. Las apariciones y mensajes se iniciaron el 1 de septiembre 2001 a 1 de septiembre 2008, a Leandro Ferreira, en la ocasión de 16 años. Estas apariciones son analizadas por la Iglesia Católica. Algunas veces, algunos jóvenes también vieron a la Virgen en el mismo momento. Cuando fueron interrogados por separado, se demostró que tuvieron la misma visión. Muchas personas oraron por el mundo entero e han logrado gracias. Él vidente dice:
“El 1 de septiembre 2001, yo oraba el Rosario en casa las 17.00. Nuestra Señora llegó de forma inesperada y diciendo un mensaje para todos nosotros. Yo fui muy sorprendido. Nunca imaginé una cosa así. Tomé el cuaderno y escribí el mensaje. Oré otro Rosario 18.00. Muchas personas rezan en este momento. Y durante este Rosario, ella continuó el mensaje. Después del Rosario, yo pidi una señal para que las personas acrediten. Ella pidió para mirar al cielo. Eran 18.40. Miré al cielo y vio una gran estrella fugaz amarilla. Esta estrella cruzó el cielo y pasó en la constelación de la Cruz del Sur. Nuestra Señora terminó su mensaje y se fue. Muchas de esas apariciones fueron en iglesias aquí. Nuestra Señora quiso así. Los presentes sentían mucha paz en el momento. Cuando vi Nuestra Señora por la primera vez, recordé la frase: "Dios es amor." Lo que ella transmite más es el amor. Su belleza es indescriptible e inolvidable. En las apariciones de Divinopolis, Brasil, la Virgen se apareció joven y bella, de unos 20 años, piel bronceada, cabello castaño, ojos verdes, labios de color rosa, el vestido azul claro, velo blanco y flotando en una nube. Recuerdo todas las veces que la Virgen Maria vino. Nuestra Señora tiene una forma de Madre y Santa. Por lo general, ella llegaba con los brazos extendidos y acogedores, otras veces, con las Manos en el Corazón. A veces, ella vino con uno globo terrestre en sus Manos, otras veces con un Rosario blanco brillante, otras veces con flores y diciendo que eran nuestras oraciones, otras veces con doce estrellas amarillas alrededor de su cabeza. En las apariciones, Nuestra Señora siempre miraba a todos los presentes. Muchas veces, ella llegaba feliz por aquelles que practican sus peticiones. Otras veces, ella vino preocupada por la situación actual del mundo. Y algunas veces, ella lloró por tantas ofensas hechas contra Dios. Las apariciones fueron frecuentes em los años de 2001 y 2002. Fueron mensuales desde marzo de 2003 y terminaron el 1 de septiembre de 2008.”
Mensaje del 1 de septiembre de 2008:
