Debemos meditar más sobre los grandes Dolores que la Virgen Maria sufrió en su vida en la Tierra, especialmente en el Calvario. Nosotros no podemos imaginar la dimensión sus Dolores. La meditación acerca de los Dolores de Maria es una manera de agradecer a ella por todo o que sufrió debido a nuestra culpa e por la nuestra salvación. Ella nos recuerda las Dolores que sufre hoy en día debido a la situación del mundo.
Mensaje del 1 de septiembre 2008 - Extracto: "Los siete años de estas apariciones fueron por los méritos y en honor de mi Siete Dolores."
Mensaje del 15 de marzo de 2008 - Sábado de los Dolores de María: "Mediten sobre la Pasión de Jesús y mi Siete Dolores, no sólo durante la Cuaresma, sino también durante todo el año. Contemplen a Jesús Crucificado. Reconozcan que sus Heridas fueron causadas por sus pecados y decidanse no cometerlos más. Pero no piensen que las cosas en la Biblia son cosas del pasado. Ellas son actuales para ustedes. Y hoy, en vez de repetir las maravillas de la época de Jesús, el mundo renueva la crueldad increíble de aquél tiempo. Como Judas Iscariote traicionó a Jesús por miseras treinta piezas de plata, hoy en día muchos abandonan a Jesús a causa de miseras riquezas y miseros amores de este mundo. Como aquellas personas prefirieron a Barrabás que a Jesús, hoy en día muchos prefieren las cosas malas que las cosas de Dios. Los crímenes de hoy son como nuevos azotes en el Cuerpo de mi Hijo. Cómo aquellos soldados torturadores que crucificaron a Jesús, hoy existen muchas personas malvadas, verdaderos torturadores que matan, roban o hacen a otros sufrir. Cuando contemplaren a la Sagrada Familia huyendo de la masacre de Herodes a Egipto, oren por las víctimas inocentes de las guerras y la violencia. Cuando contemplaren San José y yo buscando el Niño Jesús y encontrando Él tres días después en el Templo entre los doctores de la Ley, oren por los padres y madres que pierden a sus hijos, Cuando contemplaren por los padres y madres que pierden a sus hijos en las desapariciones y las injusticias. Estos sufren más. La situación del mundo actual es como una espada de dolor que atraviesa mi Corazón. Pero yo sé que esta espada será retirada cuando haber la conversión de toda la Humanidad. Por eso, hijitos, hagan sacrificios por la gloria de Dios y por el triunfo del Sagrado Corazón de Jesús. Cargar la cruz por amor de Jesús es una de las mayores glorias que ustedes pueden dar a Él. El mundo me da nuevos dolores y nuevas lágrimas. Pero cuando Jesús reinar en todos los corazones, ustedes vencerán. Cuando todos vencieren, mi Inmaculado Corazón, que hoy es doloroso, triunfará y mi alegría será aún mayor en la victoria que es Jesu Cristo, Nuestro Señor."
“Por la Virgen Dolorosa, su Madre tan piadosa, perdona nos, mi Jesús. Perdona nos, mi Jesús.”
“Mi Madre Santísima, imprime las Llagas de Jesús Crucificado en mi corazón.”
“Jesús mío, escucha nuestras súplicas por los méritos de los Dolores y Lágrimas de María.”
Mensajes de Nuestra Señora en Divinópolis, Brasil.