Los mensajes de Nuestra Señora acerca de el amor de Dios Padre nos alegran. Ella rezó el Padre Nuestro con las personas presentes en algunas apariciones y les pidió para se dar las manos.
Mensaje del 7 de agosto de 2006 - "Dios quiere la felicidad y la alegría, la alegría de ver a sus hijos regresando a Él. Hoy, muchos hijos están tan lejos de Dios, el Padre Celeste, como huérfanos en el mundo... Dios Padre no abandona a nadie, y muchos hijos viven como si Él no existiese. Él existe! Y Él está allí, siempre cerca de ustedes, amando los cada día más y más. Él nunca se olvida de ustedes. El Padre no se olvida de ninguno de sus hijos. Incluso si este hijo lo maltrate con el pecado mortal, Dios sigue amando a este hijo. Pero este es el momento para consolarlo por las ofensas que recibe, por el olvido que Él recibe y por la falta de amor por Él. Existe mucha falta de oración a Dios... Una persona ora poco cuando ella ama poco al Padre Creador. Una persona ora mucho cuando ella quiere mucho a Dios y lo ama mucho. ¿Dónde ustedes están, hijos míos? ¿Están en el lado de los que tienen amor a Dios, o en el lado de los que dan poca importancia a El? ¡Decidanse! Oren cada dia, más y más al Padre Celeste, el Padre infinitamente bueno y amoroso que los cubre con su gracia y su misericordia continuamente. Abran sus corazones para recibir sus dones y su amor, un amor infinito. Así, hijos míos, ustedes serán felices con Él. Así, ustedes sentirán su presencia maravillosa en este mundo y nada les asustará, porque el Padre siempre les protege de todo mal y todo peligro. Él no abandona a ninguno de sus hijos, ¡ninguno! Hoy, la Humanidad vive un momento de dolor porque se apartó de Dios, porque no ama el Padre como debe amarlo, porque ella se olvidó de Él. Y con el olvido, Satanás viene a hacer desorden y sufrimiento. Oren cada día, más y más a Dios que es un Padre y no un padrastro. Él es un Padre y ustedes son sus hijos, amados infinitamente por Él. Sólo así, orando e viviendo la oración del Padre Nuestro, ustedes lo conocerán. Quién conoce a Dios verdaderamente, nunca se aparta de Él, jamás. Quién conoce a Dios verdaderamente, ya lo tiene en su corazón para siempre hasta la vida eterna en el Cielo."
Mensaje del 2 de octubre de 2001 - "Yo quiero les conducir al Padre del Cielo. Elle es bueno y dulce para ustedes. No piensen que Dios es airado ni serio. Él es bueno, misericordioso y Santo. Su poder es infalible. Recuerden, hijos míos, ¿que tienen un Padre que es dueño de todo! ¿No están felices con eso? ¿Permanecen tristes y melancólicos por la vida y se quejando por ella? Crean, amen y oren al Padre Celeste. Oren el Nuestro Padre. Dios es Padre, Dios es amor, Dios es la esperanza de la Humanidad entera. Él quiere salvarla. Dios no quiere el mal de los pecadores. Él quiere la auténtica conversión de sus vidas a Él que es Padre misericordioso, amoroso, bueno e incomparable. Sepan, mis queridos hijos, Dios permanece muy triste cuando ustedes se olvidan de que Él existe y los ama. ¡Muchos de ustedes no dan importancia para Él... Él está allí, ¡a su lado! Él quiere salvarlos y llevarlos al Paraíso que es su Casa y futura Casa de ustedes que son sus hijos, hijos de su amor y su gloria. Busquen a Dios. Este mundo aún puede ser salvo. Acrediten. Crean en Dios, su Padre. Hijitos míos, estoy muy agradecida por haber recibido este mensaje. Ayuden a los difundir. Ustedes no saben lo que puede venir a este mundo casi perdido. Sólo Dios puede salvarlo. Mis hijos queridos, permanezcan con mi paz y la paz de Dios, nuestro Padre. Él es mi Padre y su Padre."
Esta oración fue enseñada en Fátima y también recomendada por Nuestra Señora en Divinópolis el 4/12/2001: “Dios mío, yo creo, adoro, espero y te amo. Yo pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman.”
Mensajes de Nuestra Señora en Divinópolis, Brasil.