Mensaje del 1 de octubre de 2007 - "Muchos de ustedes se preocupan por todo, menos para hacer la voluntad de Dios. Muchas personas oran continuamente por sus problemas y necesidades, pero no oran por los otros que están sufriendo cerca de ellos. No sean egoístas sólo mirando a sus necesidades y no mirando a los sufrimientos de los demás. Si ustedes no pueden ayudar a los demás con acciones, ayuden con oraciones. Esto es lo mínimo que pueden hacer. Muchas personas piden gracias a Dios, pero ellas no tienen mucho amor en sus corazones. Y son sus propios pecados que impiden que las gracias que se conviertan en realidad. Muchos de ustedes piden las gracias materiales, pero no piden la gracia más importante que es la conversión. Muchas personas reciben la Comunión, pero no dejan que el fuego del amor se encienda en su interior. En cada Comunión, dejen el amor de Jesús arder en sus corazones y nunca disminuir. Dejen el fuego de este amor irradiar de sus corazones a los demás. No dejen este amor sólo dentro de ustedes. Sean portadores del amor de Dios y lleven este amor para los hermanos. Carguen y muestren este amor a los demás! Muchos de ustedes oran fervientemente pidiendo cosas tan simples y de poca importancia, cosas que pasan. Dios quiere dar lo que piden. Pero Él también les pide. Él les pide que vivan la Biblia. Recuerden de la higuera que Jesús buscó y no encontró ningún fruto. (Marcos 11,12-20) Como Jesús buscó frutos en la higuera, Él también buscará frutos de santidad en ustedes, frutos de buenas obras. Muchas personas recurren a la intercesión de los Santos, pero no piensan en seguir los ejemplos maravillosos de estos Santos. Si el Patrón de sus parroquias es un Santo, sigan el su ejemplo de vida! Si el Patrón soy Yo, sean como soy! Si el Patrón es mi Hijo Jesús, actuen como Él! Cuando ustedes viviren la santidad, las gracias vendrán en mayor abundancia."
Mensajes de Nuestra Señora en Divinópolis, Brasil.